Qué pueden hacer los padres para proteger a sus adolescentes al volante
Consejos prácticos para guiarlos durante esta etapa peligrosa
Los accidentes de auto son la principal causa de muerte entre los adolescentes estadounidenses. De hecho, según Insurance Institute for Highway Safety (IIHS, Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras), la tasa de accidentes mortales por milla recorrida entre los jóvenes de 16 a 17 años es casi tres veces más alta que la de los conductores de 20 años o más.
En 2021, el año más reciente del que se dispone de datos, 2,116 conductores de entre 15 y 20 años murieron en accidentes, lo que supone un aumento del 11% con respecto a 2016, y se estima que 203,256 conductores adolescentes resultaron heridos.
Datos como estos hacen que tener un conductor novato sea tal vez uno de los momentos más estresantes y preocupantes para los padres. Pero hay pasos importantes que los padres pueden seguir para ayudar a los jóvenes conductores a obtener buena experiencia al volante y mantenerse lo más seguros posible.
Los padres pueden dar el ejemplo
A pesar de la percepción de que nuestros adolescentes y conductores jóvenes parecen saberlo todo, siguen observando y aprendiendo del comportamiento de sus padres. El ejemplo que les das al conducir puede ser lo más importante para mantenerlos seguros, incluso más que cualquier otro consejo de seguridad que les hayas dado en toda su vida. Así que haz que cuente.
Tanto si conduce tu hijo adolescente como si conduces tú, asegúrate de:
Abrocharte el cinturón: Aunque las leyes sobre el uso del cinturón de seguridad son estrictas en muchos estados, los adolescentes son los que menos lo usan, especialmente cuando son pasajeros.
Asegúrate de abrocharte el cinturón tú mismo y de que ellos también lo hagan.
Dejar el teléfono: Los adultos deben evitar la tentación de contestar una llamada o mirar un mensaje de texto, no solo por el riesgo que supone, sino también por el mensaje que le transmites a tu joven conductor. Dale el ejemplo pidiéndole a tu hijo adolescente que envíe un mensaje de texto o haga una llamada por ti.
Reducir la velocidad: Según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA), la velocidad es un factor que está relacionado con casi un tercio de las muertes en accidentes de tráfico. Los conductores jóvenes todavía no tienen una idea clara de cuánta velocidad es excesiva, así que conducir más despacio de lo normal es más seguro para ambos.
No beber y conducir: Ten especial cuidado con el mensaje que le estás dando a tu hijo adolescente cuando conduces después de haber tomado una copa o dos de vino en una cena. Insiste en la importancia de designar a un conductor y deja que tus hijos adolescentes escuchen las conversaciones que mantienes con otros adultos sobre este tema.
Considera la posibilidad de establecer tu propio contrato de conducción: escribir una serie de normas y, lo que es quizás más importante, las consecuencias a las que se enfrentará tu hijo adolescente si las incumple, deja claras cuáles son tus expectativas. Puedes encontrar ejemplos de contratos en muchos sitios web, como este de la Asociación Americana del Automóvil (AAA) (PDF) o en algunas compañías de seguros.
Los programas de permisos de conducir graduales (GDL, por sus siglas en inglés) de muchos estados han ayudado a aliviar parte de la presión que sufren los padres mediante la aplicación de normas de conducción estrictas, que exigen ciertos niveles de formación y un mínimo de horas de experiencia al volante (algunas con los padres), restringen las horas de conducción y limitan el número de pasajeros que puede llevar un conductor novato. Pero esas restricciones a la larga expiran, normalmente alrededor de los 18 años o una vez que el conductor joven ha tenido el permiso durante un periodo de tiempo determinado. Por eso es importante que los padres colaboren con las normas GDL para ayudar a los conductores adolescentes a adquirir la mayor experiencia posible al volante, manteniendo al mismo tiempo la máxima seguridad.
Características de seguridad en autos para adolescentes
Varios fabricantes de coches ofrecen modelos con funciones específicas que se basan en el concepto de licencia gradual para que los padres puedan establecer ciertas restricciones y supervisar el comportamiento al volante.
Por ejemplo, Ford ofrece desde hace tiempo un sistema enfocado en los adolescentes, llamado MyKey, que brinda restricciones, incluyendo un timbre que suena cada 30 segundos hasta que los ocupantes delanteros se abrochen el cinturón de seguridad. El sistema de Ford tiene otras características útiles para los padres, como el bloqueo de contenidos explícitos en la radio por satélite, una advertencia temprana de poco combustible y la posibilidad de impedir que los conductores adolescentes desactiven los sistemas de seguridad.
Algunos modelos de General Motors tienen un modo para conductores adolescentes que permite a los padres programar limitaciones, como establecer una velocidad máxima, y te da un informe que indica la distancia recorrida, la velocidad máxima y si se usaron los sistemas de seguridad. También tiene un recordatorio del cinturón de seguridad que silencia el sistema de audio hasta que el conductor y, si es el caso, el pasajero delantero, se abrochen el cinturón.
Muchos otros fabricantes de vehículos ofrecen sistemas que pueden alertar al propietario (en este caso, un padre) cuando el auto circula a una velocidad excesiva o sale de una zona definida.
Elige el auto adecuado para un nuevo conductor
El auto que conduzca el adolescente es importante. Nuestras listas de autos recomendados para conductores adolescentes se basan en la filosofía de ayudarles a evitar accidentes y prevenir lesiones en caso de que se produzca uno. Estos autos han demostrado tener un buen rendimiento, ser seguros y fiables.
Pero, además, hemos reducido la lista de autos recomendados por CR a aquellos que no son tan rápidos como para tentar a conducir a exceso de velocidad. Seleccionamos solamente aquellos con buenas distancias de frenado y buenas calificaciones en manejo de emergencia. El control electrónico de estabilidad (ESC) estándar no se tiene en cuenta en las últimas listas dado que el vehículo más antiguo que aparece en ellas es un modelo de 2011. Esta función de seguridad esencial y comprobada es equipo estándar en todos los vehículos nuevos desde el modelo 2012, y debería estar presente en cualquier auto que maneje un adolescente.
Hemos dividido nuestra lista en autos nuevos y de segunda mano, incluyendo modelos que tienen un costo de menos de $10,000. Aunque padres o adolescentes puedan sentirse tentados por el vehículo más barato, creemos que vale la pena elegir el más seguro y confiable que puedan pagar.
Conviértete en controlador aéreo
Si eres padre de un conductor adolescente, gestiona los viajes de tu hijo con algo parecido a un plan de vuelo de avión. Uno de los comportamientos más arriesgados de los adolescentes es “conducir sin rumbo fijo”. Es lógico que cuando un adolescente tiene un destino en mente, como una cita, un evento deportivo o una fiesta, es más probable que llegue allí de forma segura. En otras palabras, conducir con un propósito tiene más posibilidades de dar un resultado seguro que conducir sin un rumbo claro.
Los elementos que deben incluirse en el plan de vuelo son:
- Destino
- Ruta
- Hora del día en que viajan
- Cuándo se espera que salgan y lleguen
- Qué auto conducen
- Su plan para ponerse en contacto con alguien
- Cuál es su plan de contingencia en caso de que algo salga mal
- Confirmación de que han descansado bien y están alertas (la fatiga es especialmente preocupante en los adolescentes)
Si tu hijo adolescente no puede darte detalles sobre cada uno de estos puntos, tal vez no debería hacer el viaje. Y, por supuesto, si alguno de los detalles cambia durante el viaje, debería ponerse en contacto contigo, como controlador, para revisar su plan de vuelo.
En resumen, incluso cuando las restricciones del GDL expiren para tu conductor novato, tu trabajo de convertirlo en un conductor mejor y más seguro aún no ha terminado. Supervisa lo que hace tu hijo y sé consciente también de tu propio comportamiento al volante.